10 mil pesos la reparación del daño para dos Huerfanas. 1 % del salario mensual de AMLO
Redacción.
Tras el "atentado" contra el Secretario de Seguridad de la Ciudad de México, una de las víctimas, Gabriela Gómez, quién para esta redacción, debiese tomarse como víctima del Estado Méxicano. En el mismo nivel que ocupan los 43 de Ayotzinapa, el motivo es que en gobierno esconde y falla ante situaciones de gobernabilidad nacional.
Queremos centrarnos más en las víctimas, más en los daños... más en las familias que han perdido a algún ser querido. Hemos escuchado versiones no oficiales sobre cuestionamientos como: ¿qué hacía fuera de su casa en esta pandemia? ¿porqué no se quedarón en su casa? esto no les habría pasado!. Preguntas que nos dejan si aliento, sin una capacidad de entendimiento de la opinión pública.
Por otro lado, la desvaloración de una vida humana ante cualquier situación por parte de las autoridades de la #CDMX y al mismo tiempo del Gobierno Federal. Hemos visto cómo los números de muertos por COVID-19 han sido minimizados o revalorados para defender los errores y las malas decisiones. Esa errónea idea de estabilidad que tiene la 4T y donde los recursos para bienestar abundan, no se nos hace coherente que la vida de un funcionario sea 111 veces más valiosa (mensualmente) que la de una madre, de una mujer, de alguién que trata de darle a sus hijos una vida mejor.
La ley de Víctimas de la Ciudad de México en el numeral IX. que refiere a la dignidad, a la letra dice: "...todas las autoridades del Estado están obligadas a garantizar que no se vea disminuido el mínimo existencial al que la víctima tiene derecho, ni sea afectado el núcleo esencial de sus derechos." lo cuál hasta ahora no se ha cumplido.
Particularmente queremos detenernos en el Articulo 57 parrafo tercero que dice:" En los casos de muerte de la víctima, como consecuencia de la comisión del delito o el hecho victimizante, el cálculo para el lucro cesante se realizará tomando en cuenta la pérdida de ingresos por la actividad que desempeñaba la víctima, una proyección inflacionaria anual y la esperanza de vida para el año en que ocurrió la muerte." Gabriela Gómez tenía 26 años, dos hijas, era comerciante y el automóvil en el que viajaba recibió impactos calibre .50 capaces de perforar el blindaje de un tanque de guerra.
Desde este punto de vista, es justo recibir una reparación del daño correspondiente al otorgamiento de 1 beca por medio año para jóvenes? o lo correspondiente al gasto semanal en la papeleria de la oficina de Claudia Sheinbaum? Es verdad que las vidas de mexicanos siguen valiendo tan poco? es verdad que la estabilidad de un país depende de víctimas inocentes? es verdad que la vida de una inocente vale menos que la del Secretario? Para nosotros las vidas valen lo mismo, las vidas no se pueden contar por 8 mil u 80 mil sin reparar, la vida de 1 como el de 43, indignan. Las víctimas son víctimas para éste Estado Mexicano, para todos los gobiernos, incluyendo a esta transformación.