Ahora

Nadie gobierna Toluca. Desprotegida, olvidada e insegura enfrentará la ciudad al PRI.


La ciudad pasa por el peor momento que se ha suscitado en por lo menos 50 años, 23 es la cifra de homicidios en la ciudad en los 5 meses desde que perdiera la reelección el abanderado de Morena. 

230 millones es lo que el Ayuntamiento debe a sus proveedores y la cifra se feminicidios supera casi al triple lo comparado en 2018. No obstante la calma y la cordialidad con que el Alcalde electo ha tomado la transición, contradice lo que en campaña, prometía a quienes lo eligieron. 

Se escucha entre los electores y gente apegada al PRI, preguntas como: ¿Cuándo resolverá el pago de los salarios atrasados, las primas vacacionales o al menos, presentarse con aquellos que se jugaron su trabajo para apoyarlo?

Lo que preocupa como ciudadanos, es que alguna autoridad garantice la justicia y la seguridad en la capital del Estado. Que esa persona, que aún, es Alcalde de Toluca termine esta mediocre gestión  del último año, que regrese a donde prometió en campaña, que ayude a quienes juró ayudar y que pague a quienes debe. 

Paralelamente, también esperamos, que el alcalde electo cumpla con llevar a juicio a aquellos que faltaron a la máxima de la 4T… “No mentir, no robar”. Y lo que esperamos de alguno de los dos Alcaldes es que den la cara a una ciudad que ha perdido su belleza, su calma y su tranquilidad gracias a la mirada ciega de sus autoridades.